Muchos son los motivos para empezar a introducir la escritura en nuestra vida. Escribir siempre es positivo, deja salir muchas cosas que tenemos dentro y que a veces ni sabemos que tenemos ahí, y además ejercita muchas capacidades para desarrollarlas, capacidades como la memoria, la concentración, la imaginación…
«No es la felicidad lo que nos hace ser agradecidos. Es agradecer lo que nos hace felices.» +
TIEMPO REQUERIDO
15 minutos por día, al menos una vez por semana durante al menos un mes.
Los estudios sugieren que escribir en un diario de gratitud tres veces por semana podría tener un mayor impacto en nuestra felicidad que escribir un diario todos los días.
¿Cómo empezar a escribir nuestro Diario de gratitud?
No hay una manera incorrecta de mantener un diario de gratitud, pero aquí hay algunas instrucciones generales a medida que comienza.
Escribe hasta cinco cosas por las que te sientas agradecido. El registro físico es importante, no solo hagas este ejercicio racionalmente. Las cosas que escriba pueden ser relativamente pequeñas en importancia («El sabroso sándwich que comí hoy») o relativamente grandes («Mi hermana dio a luz a un bebé sano»).
El objetivo del ejercicio es recordar un buen evento, experiencia, persona o cosa en tu vida, y luego disfrutar de las buenas emociones que vienen con él.
¿De qué puedo hablar en mi Diario de gratitud?
- Gente que tienes cerca y es positiva para ti.
- Cosas que te pasen, situaciones concretas.
- Otros seres que te rodeen (animales, plantas…).
- Cosas materiales (casa que te da cobijo, bañera para un buen baño caliente, cámara para hacer fotos magníficas).
- Rasgos de tu carácter (empatía, ser buen amigo, capacidad de escucha).
- Capacidades propias (saber cantar, escribir bonito, dibujas aunque no sea perfecto).
Mientras escribes, aquí hay algunos consejos importantes:
1) Se lo más específico posible, la especificidad es clave para fomentar la gratitud. «Estoy agradecido porque mis compañeros de trabajo me trajeron sopa cuando estuve enfermo el martes» es más efectivo que «Estoy agradecido por mis compañeros de trabajo».
2) Da prioridad a la profundidad más que a la cantidad de cosas. Procura explicar a detalle qué agradeces de una persona o cosa en particular más que hacer una lista de muchas cosas por las que estás agradecido(a).
3) Hazlo personal. Centrarse en las personas a quienes agradeces, tiene más impacto que centrarse en las cosas por las que está agradecido.
4) Puedes intentar imaginar cómo sería tu vida sin ciertas personas o cosas, en lugar de solo contar todas las cosas buenas. Agradece los resultados negativos que evitó, escapó, evitó o convirtió en algo positivo.
5) Vea las cosas buenas como «regalos». Pensar en las cosas buenas de su vida como regalos que los guardias no dan por sentado. Intenta saborear los regalos que has recibido.
6) Disfruta las sorpresas. Trata de registrar los eventos que fueron inesperados o sorprendentes, ya que estos tienden a generar mayores niveles de gratitud.
7) Escribe con regularidad. Ya sea que escribas cada día, cada tercer día o una vez a la semana, dedica un horario regular para escribir y respeta ese compromiso. Pero…
8) No te excedas. La evidencia sugiere que escribir de vez en cuando (1-3 veces por semana) es más beneficioso que un diario. Esto podría deberse a que nos adaptamos a los eventos positivos y pronto podemos adormecerlos, por eso ayuda a saborear sorpresas.
Pero ¿por qué funciona?
Si bien es importante analizar y aprender de los malos eventos, a veces podemos pensar demasiado en lo que va mal y no lo suficiente en lo que va bien en nuestras vidas.
Un diario de gratitud nos obliga a prestar atención a las cosas buenas de la vida que de otro modo podríamos dar por sentado. De esa manera, comenzamos a estar más en sintonía con las fuentes cotidianas de placer que nos rodean, y el tono emocional de nuestra vida puede cambiar de manera profunda.
En realidad, escribir sobre estos eventos es clave: la investigación sugiere que traducir los pensamientos a un lenguaje concreto nos hace más conscientes de ellos, y profundiza su impacto emocional.
Este es el momento, busca ese cuaderno y dedícate un tiempo, solo para ti, piensa un poco en eso bueno que, a lo mejor ahora no ves, y escríbelo; cambia tu rutina y con ello cambia un poco tu mundo.
Con cariño, agradeciendo que estés en mi camino.